miércoles, 22 de mayo de 2013

Sobre las negras encinas bailan los dioses

Los días de la semana deben su nombre a los planetas que cruzaban el cielo cuando sobre la tierra aún no había telescopios ni contaminación lumínica ni de la otra. Cosas del progreso, en fin... antes de progresar tanto, y quizás también para eso, los dias de la semana se consagraron a los astros errantes, así:
  • Los Lunes, estaban dedicados a la luna, en latín lunae. En inglés es Monday, y luna, moon.
  • El Martes, viene del latín Martis, día de Marte.
  • Miércoles, Mercurii dies, día de Mercurio.
  • Jueves, Iovis dies, día de Júpiter.
  • Viernes, Veneris dies, día de Venus
  • Sábado, del bíblico Sabbatum, día de reposo. En inglés sin embargo Saturday, dia de Saturno.
  • Domingo, del latín dies Dominicus, día del Señor. En inglés Sunday, y en la antigua Roma dies solis, día del sol.
El fotógrafo extremeño Juan Manuel Pérez Rayego, ha fotografiado a los 7 “planetas” a su puesta, teniendo como referencia una misma encina. Desde Mérida, éste es el vídeo del resultado


Así explica el autor su obra:

“Para un fotógrafo de la naturaleza como yo, especializado últimamente en fotografía con motivos astronómicos, dar con un buen horizonte para su trabajo es muy difícil, y máxime cuando no se puede viajar. Encontré este árbol y esa misma noche fotografié a Mercurio.
Unos días después, fotografié al Sol,Venus y la Luna en el mismo día (las de estos últimos no están en el vídeo), y aunque Júpiter se me escapó esa noche y podría haber esperado a Marte a altas horas de la madrugada, decidí poner en marcha el proyecto tras orientarme con una calculadora astronómica sobre el paso de un Saturno visible por el árbol a principios del mes de mayo.
En cuanto este planeta fue visible y fotogénico (en la tercera sesión), cerré el trabajo de campo: el tiempo también es protagonista de 7, de ahí que se noten algunas brusquedades en el mismo, como en el pase de Júpiter, o de Mercurio (como entonces no sabía qué destino iban a tener las fotografías, tuve la ocurrencia de mover el trípode mientras los planetas caían sobre el árbol), pero no quise repetir las tomas, para, como decía, hacer protagonista al tiempo que tardé en ver los siete astros detrás del árbol.
Y, como tenía que esperar a Saturno, me entretuve registrando las conjunciones que entraban en cuadro (todas las fotografías están a pantalla completa, menos el recorte en algunas para enderezarlas), la Luna en perigeo…

Me parece extraordinario.

15 comentarios :

  1. No solo te parece extraordinario a tí. Hoy la meditación del día se la han llevado los astros, la encina y la música.
    Gracias por traerlo.
    Un beso

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    1. ¿Verdad que si? ufff a ti por opinar. Tú, que eres una teatrera,;), fíjate qué funciones dan en el Poniente...

      La meditación de hoy, divina.

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  2. No sólo te lo parece, lo es. Fantástico.
    Besos. Lenteja

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    1. Gracias Lenteja. Ya ves, al cielo se puede mirar buscando la lluvia tan deseada, para cegarse con el sol o para deslumbrarse con las estrellas...
      Besos. Esteticien

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  3. Precioso. Espectacular. Enhorabuena al observador , por su ojo y su paciencia. Gracias a ti por tu generosidad y buen criterio para compartir.

    Un saludo, desde la balconada.

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    1. Desde la balconada también es un buen lugar para observar a los que pasan y lo que pasa.. Gracias por pasarte!

      Saludos.

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  4. Muy bello... pero, sabes? no puedo dejar de pensar en el fotógrafo. En su tiempo de observación, de preparación; en sus atardeceres y en la alegría de ver la estrella del alba. La naturaleza nos da la vida y de paso una lección de vida. No puedo dejar de pensar en el fotógrafo. Casi lo veo como a un pescador. Con todo el equipo. Preparado para fotografiar el tiempo durante horas. La encina atemporal en el centro del tiempo. Y sobre todo no puedo dejar de pensar en cómo dormiría el fotógrafo esa noche y las restantes. No todos dormimos igual, es cierto. Y después de haber tenido en el objetivo focal ese cielo y ese campo, el fotógrafo debe tener sueños diferentes al resto. Al resto de tantos.
    Un beso, Esteticien

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    1. Es verdad, Victoria. A veces olvidamos que vemos el mundo por segunda vez, una vez que algunos, los descubridores, nos lo muestran. Ellos, los conquistadores, esos que se aventuran allí donde ni siquiera imaginan los otros, tienen mucho de locos. Son.
      Qué privilegio dormir en ese escenario del Poniente, verdad? Cada cual, a su manera... yo fíjate, me quedo con los sueños despiertos de los locos.

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  5. Dicen, cuentan, comentan..que en la antigua Grecia los planetas eran conocidos como "errantes" y con los romanos "estrellas errantes"....Me supongo que la antítesis con la encina de hoja perenne, es la evocación que me viene, el concepto perdurabilidad-fugacidad, quedarse- irse, estar-huir....
    La otra Delírica

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    1. Una encina puede llegar a vivir unos mil años... ¿cuántos deseos habrá pedido en su vida al paso de estrellas errantes? y no ha pedido irse de donde se encuentran sus raíces, por mucho que le hayan seducido las lunas más perigeadas...
      Yo como la encina, también me quedo aquí a delirar ;)

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    2. Mejor perigeadas que apogeadas....Por cierto otra (+/-)
      Rebeso deliríco

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  6. ¡Q u é p r e c i o s i d a d!
    ¡Gracias! (:

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